Alrededor de los 3 o 4 años, el mundo de los niños se hace más grande y sienten curiosidad por entender todo aquello que les rodea. Es el momento en el que tu hijo o hija empieza a cuestionarlo todo con el famoso «¿por qué?».
¿Por qué las personas no tenemos garras como los osos? ¿De dónde vienen los bebés? ¿Por qué no puedo pedir todo el catálogo de juguetes a los Reyes Magos? Algunas preguntas pueden ser muy graciosas, otras te pondrán en un compromiso y otras quizás no sabrás cómo responderlas. La única recomendación que podemos hacerte es que te lo tomes con paciencia y humor y que intentes explicarlo todo de forma didáctica y con palabras que tus peques puedan entender.
Una pregunta maravillosa es por qué desaparecieron los dinosaurios. Se trata de unos seres que fascinan a los más pequeños y que han dado origen a muchos cuentos y dibujos animados. A diferencia de muchos otros seres con un aura fantástica, como los dragones y los unicornios, los dinosaurios sí que existieron y pisaron el mismo planeta en el que vivimos, así que su interés por conocer más sobre ellos se multiplica ahora que empiezan a distinguir la fantasía de la realidad.
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La extinción de los dinosaurios para niños
La pregunta es muy buena, así que deberías hacérselo saber al niño o niña. De hecho es tan buena que todavía no tiene una respuesta totalmente probada, ya que los científicos no saben con un 100% de seguridad por qué razón se extinguieron los dinosaurios.
Para que la respuesta no quede así de sosa, puedes explicarle alguna de las teorías que se manejan. La más extendida es que cayó un meteorito de 200 kilómetros de diámetro. Puedes intentar que comprenda qué significa esta medida poniéndole de ejemplo que se trata de la distancia entre dos ciudades que conozca.
El meteorito no solo afectó al lugar donde cayó y provocó un inmenso cráter, sino que también levantó una nube de polvo, tsunamis y erupciones en todo el mundo. La luz del sol no entró en la tierra y murieron todos los dinosaurios, así como muchas especies de plantas y animales.
A pesar de que esta teoría hoy se maneja como cierta por muchos científicos, hay otras interesantes. Y es bonito que los niños las conozcan. Algunos investigadores defienden que los volcanes empezaron a erupcionar lava y polvo, provocando una nube tan densa que no dejaba pasar la luz del sol. De esta forma, las plantas no podían crecer, los herbívoros murieron de hambre y, poco después, los carnívoros hicieron lo mismo.
Esta pregunta también es una buena excusa para explicarle a tu hijo o hija que hay cosas que todavía no se saben y que hay personas muy inteligentes que estudian y trabajan para saberlo todo. No solo es que tú no sepas la respuesta, ya que para ellos los padres lo saben todo, sino que ni tan solo lo saben los científicos especializados en la materia.
Además, puedes hacerle partícipe y preguntarle «¿por qué crees tú que se extinguieron los dinosaurios?». Igual que cuando le estás leyendo un cuento y buscas transmitirle la pasión por la lectura, hacerle pensar hará que aprenda a expresarse mejor y así conocerás sus aficiones e inquietudes.
Curiosidades de los dinosaurios para niños de preescolar e infantil
Si tu hijo o hija adora todo lo que rodea a los dinosaurios, más allá de cómo desaparecieron, también quedará maravillado si le explicas alguna curiosidad sobre ellos. Ahí va alguna:
Había muchos tipos de dinosaurios hace más de 65 millones de años. Los había de muy rápidos (Velociraptor), otros que tenían un cuello gigante (Diplodocus), algunos que eran muy agresivos (T-Rex) e incluso existían dinosaurios que volaban (Pterodactylus).
No todos los dinosaurios eran inmensos. La especie Hesperonychus solo medía entre 50 cm y 1 metro y se alimentaba de insectos y dinosaurios bebé.
Hoy en día es posible ver los esqueletos de los dinosaurios en algún museo e incluso quedan las huellas de sus pisadas en varias partes del mundo.
Hay algunos animales que conocemos en la actualidad que ya existían en la época de los dinosaurios. Es el caso de los tiburones, las abejas, los cocodrilos o los cangrejos. En este artículo se explica muy bien por qué sobrevivieron, por si la siguiente pregunta de tu hijo o hija es un «¿por qué?».