Cuando los niños y las niñas se inician en la lectura es completamente normal que pasen por fases en las que leen cada palabra de forma separada, tropiecen con aquellas que son más largas o desconocidas y les cueste dar expresividad al texto. Esto puede desanimarles a seguir leyendo o incluso hacerles sentir avergonzados si lo hacen en voz alta delante de toda la clase. Pero como dice el refrán, ¡la práctica hace al maestro! Te recomendamos actividades para trabajar la fluidez lectora en primaria
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Igual que ya recomendamos varios ejercicios para practicar la comprensión lectora, hoy queremos presentarte algunas actividades para trabajar la fluidez lectora en primaria muy útiles para ganar rapidez y precisión a la hora de leer. Antes, presta mucha atención a cómo elegir bien la lectura adecuada para los niños y las niñas de educación primaria.
¿Cómo deben ser las lecturas en estas edades?
Lo más importante es que los cuentos, libros o textos que lean los peques despierten el máximo interés posible en ellos. La lectura nunca debe ser vista como una obligación, sino como un pasatiempo entretenido y lleno de aventuras. Es por ello que debemos dejarles elegir qué quieren leer y cuándo hacerlo.
Un tipo de lectura que atrae la atención de la gran mayoría de los peques son los cuentos personalizables. En ellos, el niño o la niña se convierte en protagonista de una trepidante historia: su nombre, aspecto físico e incluso sus familiares y amigos salen en el cuento, por lo que se siente parte de la historia desde el primer momento.
Por ejemplo, en Érase una vez conocerán personajes fantásticos como un pirata con el que buscar tesoros o un hada madrina llena de buenos deseos, mientras que en El último unicornio y yo se enfrentarán a la difícil misión de salvar el bosque de los unicornios.
Hay algunos elementos de los cuentos que facilitan mucho la lectura y ayudan a trabajar su fluidez, como la forma y el tamaño de la letra o que incorporen un glosario para resolver el significado de algunas palabras nuevas para los peques.
En MiCuento encontrarás la Colección Dislexia para niños y niñas que necesiten un mayor apoyo a la hora de leer, así como muchas actividades para trabajar la fluidez lectora en primaria. Los textos de estos cuentos no están adaptados, sino que están editados con tipografías, colores y otros detalles que facilitan su lectura, además de estar certificados por expertos. Es una colección variada, pues tiene historias para niños y niñas de todas las edades y gustos. Así, todos los lectores y lectoras que quieran pueden disfrutar de un cuento personalizado creado especialmente para ellos/as, sin barreras y con la misma ilusión de siempre.
Actividades que ayudan a trabajar la fluidez lectora
- Leer en voz alta: entre todos los beneficios de leer en voz alta, uno de los más relevantes es que obliga a los peques a no saltarse palabras y a prestar toda su atención en pronunciarlas bien y darles expresividad.
- Tarjetas con palabras sueltas: cuantas más palabras reconozcan en un texto a simple vista, más fluida será su lectura. Para ello se puede practicar con tarjetas que incluyan palabras de una temática concreta y jugar a leerlas rápido.
- Lectura de eco: un adulto lee una frase del texto e inmediatamente después el niño o la niña la vuelve a leer. Debe ser una oración larga o un párrafo corto, de manera que el peque no pueda memorizar el texto pero que le sea posible imitar al máximo la fluidez y la entonación que le ha dado el adulto.
- Cambiar el orden de las letras: consiste en practicar la lectura con palabras que tienen el orden de las letras alterado, dejando la primera y la última igual. Por ejemplo, «mi agimo jegua con la petola». De esta manera se fuerza a leer las palabras con una visión global, en lugar de sílaba a sílaba.
- Exagerar la entonación: el niño o la niña debe leer el texto como si lo hiciera para un bebé, modulando su voz para darle sentido a todos los signos de puntuación, de interrogación y de exclamación.
Finalmente, aunque todas estas actividades sirvan de refuerzo para trabajar la fluidez lectora en niños y niñas de más de 6 años, no hay mejor ejercicio que leer mucho. Incorporar la lectura entre sus aficiones hará que, paulatinamente, lean más rápido sin dejar de lado la comprensión del texto. Si se enamoran de la lectura de pequeños, estarán adquiriendo un hábito fabuloso para toda la vida.
